La
ruta turística por esta preciosa ciudad estuvo llena de sorpresas
muy agradables.
Pontevedra
es una sucesión de calles con soportales que enlazan con preciosas
plazas con encanto, flanqueadas por casas con blasones, pazos, piedra
de palacios, iglesias, fuentes y cruceiros.
Nos
dijeron que esta ciudad es de origen romano (Pontus Veteris) y
fundada por Teucro, uno de los héroes de la guerra de Troya.
Santiago
se lleva la fama y de ahí que Pontevedra juegue con el factor
sorpresa. Su casco antiguo, reducido, peatonal, coqueto, vestido con
trajes de hidalgos, conserva a pesar de ello, un aire dinámico.
En
esta ciudad mandan los peatones que disponen de sus calles medievales
para pasear a su antojo. Nos dimos cuenta enseguida porque los niños
invaden las plazas con sus juegos mientras que las terrazas de los
numerosos bares decoran los soportales con sus mesas donde no faltan
las tentaciones de unas buenas tapas.
Pontevedra
es amiga de los viandantes; así lo comprobamos. Un señor se nos
acercó: -“¿Buscan algo? ¿Puedo ayudarles?”- Fue nuestro mejor
guía. Otra de las alegrías del Camino.
Nos
explicó que hay un refrán que reza: “Cuando Vigo trabaja,
Santiago reza, Pontevedra duerme y La Coruña se divierte”. En dos
minutos nos lo rebatió con una larga lista de actividades que se
suceden a lo largo del año que indican que de dormir nada … quizá
sólo cuando la fiesta termina.
En
seguida pudimos tomar de su mano el pulso al centro histórico que hay que andarlo sin prisas
para poder disfrutar de sus encantos.
El
paisano amable nos acompañó por una ruta de plaza en plaza. Muchas
de ellas fueron bautizadas según la actividad que allí se hiciese,
la de la Leña, la de la Verdura, la de la Ferrería. Cruceros de
piedra, balconadas y soportales, pazos con abolengo y cultura y
siempre con la constante de las terrazas que parecen salones al aire
libre.
Paramos
en la Iglesia de la Virgen Peregrina, junto a la Porta do Camiño,
con planta en forma de vieira. No vamos a hablaros de siglos ni
estilos, pero sí de la emoción que supone ver la imagen de la
Virgen sencilla, vestida de romera. Eso demuestra que la locura de
hacer el Camino no es una moda pasajera, sino que miles de huellas
han forjado la cordura de todo lo que supone hacer esta andadura.
Nuestra
ruta terminó con un fuerte apretón de manos y nuestro
agradecimiento a este gallego abierto, entendido, simpático que
rezuma por todos lados el amor por su ciudad.
Pernoctamos
en el Parador “Casa del Barón” y por una noche, también nos
sentimos barones entre aquellas hermosas piedras milenarias.
Una copa de buen vino Albariño ¡¡ Va por todos ustedes !!
Arriba esa copa, Joseph!! Que rico un Albariño fresquito!!!
ResponderEliminarEn Padrón, hoy, nos hemos bebido una botella de Ribeiro fresquito con una ración de empanadillas caseras y los típicos pimientos de Padrón.
EliminarQué suerte encontrarse en el camino con un guía de excepción y voluntario. B7s
ResponderEliminarUn chico encantador que estaba paseando a su perro y se nos acercó y nos contó miles de anécdotas. Hoy he vuelto a encontrar el grupo de chicos de tu tierra y hasta han cantado unas jotas con José Antonio esperando que abrieran el albergue. Pronto nos veremos, un beso.
Eliminarleyendo como has descrito Pontevedra y viendo las fotos que has puesto, iba recordando cada rincón de una ciudad preciosa. peatonal, tranquila, con un encanto especial, y con unas personas muy amables, como bien apuntas.
ResponderEliminarAllí estuvimos por ultima vez, un día (el Viernes Santo de este año). Entramos en la "mini iglesia" de la Virgen Peregrina ... sorprendente, pequeñita, y recorrimos todo el casco antiguo (paraguas en mano).
... que bonita esta foto Joseph, bebiendo un buen albariño. como apetece estos días con el calor extremeño. pero sabe mejor en Galicia, con un buen platito de marisco.
Gracias de nuevo por las fotos y los comentarios.
Me estais dando envidia (sana), pues estoy deseando ir a pasar unos días por Galicia. En la aldea donde nació mi suegro ... a "vivir Galicia".
¡¡¡Bo caminho¡¡¡ me encanta este blog.
Joseph ¿como van esas piernas? ... Elvira, ¿y esas carreteras gallegas?
Hoy ha sido un Ribeiro blanco fresquito porque hace mucho calor. Hemos comido sólo dos raciones (pimientos de Padrón y empanadillas caseras) porque esta noche queremos ir a una pulpería a comer pulpo.
EliminarNo podemos ir a Combarro ni a Poio porque viene el hijo de un amigo a tomar un café.
Las piernas de José Antonio van solas.Está bien, con pena de que se termine esta andadura.
Mi furgoneta y mi Tom Tom son mis fieles compañeros, no me han fallado ni un día; y lo de los aparcamientos lo llevo regular.
¡¡¡ Hasta mañana!!
se me olvidaba ... os recomiendo, si podeis, que os acerqueis a Combarro y a Poio.
ResponderEliminarOs van a encantar.
El mejor texto hasta ahora, Elvireta. De principio a fin, con hilo conductor y personajes secundarios (el guía). Nos has hecho coger ganas de visitar Pontevedra. Ya veremos cuando. Un abrazo.
ResponderEliminar¡¡Ojalá sea pronto cuando podáis visitarla!!Y sino cuando estéis jubilados si es que lo estáis algún día.Un abrazo muy fuerte.
ResponderEliminarQue emocionante !! Ya me veía por esas calles y paseando poe el casco antíguo !!
ResponderEliminarCHIN, CHIN ,,!!! Beses. Cheli